Con naranjos y palmeras, se encuentra a 180 km de la Ciudad y tiene edificios congelados en el tiempo.

A 180 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, en el partido bonaerense de 25 de mayo, surge un pueblo de aspecto señorial, casi aristocrático y que lleva nombre de mujer: Ernestina. Allí viven un centenar de habitantes, entre naranjos que les dan colorido a las veredas y e imponentes palmeras que fueron importadas de las islas Canarias a fines del siglo XIX.
Su pequeño centro, que tiene como arteria principal a la avenida San Martín, cuyas dos cuadras de boulevard asfaltado (aunque hoy se vea más la tierra que el asfalto) contrastan con muchos otros puntos del pueblo aunque no tanto con algunos edificios congelados en el tiempo.
Fuente: TN TURISMO
Jueves, 15 de Febrero de 2024